lunes, 20 de julio de 2009

ENTRE EL CLARO DEL AGUA


Mis ojos humedecen el aire
ven el destello cobarde del alba
ven aves huir del mediodía
mojan los techos y las tapias
dejan salitre en techos y piedras
escurren por cortinas y ventanas
buscan otros, tantos ojos
y no encuentran los tuyos
y entre tu mirada y tanta agua
sólo surge un gorgoteo de ciudad extraña.


Hortensia Carrasco

OAXACA 29 DE OCTUBRE




Cabellos sombríos se conglomeran
achicharrándose con un sol violento
marañas incendiadas
cubren una concentración de brazos
cuyas venas se revientan de furia.
Hay un cúmulo de palabras escapando
de bocas jóvenes, de bocas viejas.
Los labios se manchan de polvo
de rabias remojadas en el sudor
de ropas de humanos tirados en el suelo.
Un policía se mira en los ojos
de un muchacho tan niño
cuando se defiende con juguetes de su infancia
mientras otros policías azuzan sus macotas:
buldozers, cancerberos furiosos
que se comen este lugar de las nubes.
Los toletes, escudos, rifles, pistolas
no son flores, no son piedras, no son resorteras
son tal vez gases que provocan
el más largo de los llantos.
Mirar duele, arde y las lágrimas
se consumen en una tierra pisoteada
y llegan quizá a un subterráneo de huesos
humedecidos un día por otros llantos.
La sangre se confunde
con el crepúsculo de ese 29 de octubre
los pañuelos blancos se enrojecen
porque en realidad no tienen paz.
En ese cielo de Oaxaca
hay pirámides de hombres
que lanzan chorros de agua
que no logra limpiar la inconformidad.
¿Qué clase de religión es la que
difunde el clérigo cuando en su homilía
apoya el enfrentamiento entre los hombres?
Ese padre, sacerdote, arzobispo
se olvida del no matarás y se esconde
en los brazos heridos de Dios
en la sangre pura de las vírgenes
y en la apestosa sotana que lo cubre.
Hay más sangre y se queda en grafitis
en manos, en fotografías, en vidrios,
en asfalto, en la memoria.
Un profesor, una profesora
un estudiante, un ciudadano
no andan por las calles manoseando el poder.
Caminan sintiendo los pellizcos
de los muchos dedos que se retuercen
en Bucareli, en San Lázaro, en Xicotencatl.
Alguien aprovecha el tumulto y se extravía
se esconde entre las rocas milenarias
en archivos nunca abiertos, en listas
ilegibles, en correos inconclusos,
en retratos retocados, en documentos
con nombres confusos: Vicente, Luis, Ulises,
Felipe, policía, prófugo, quizá Ruiz.
Hortensia Carrasco

viernes, 17 de julio de 2009

poeta y periodista


Egresada de la carrera dePeriodismo en la UNAM, los últimos 16 años he laborado en distintos medios de comunicación como El Nacional, el Universal Gráfico, unomásuno, México Desconocido, entre otros, donde he sido reportera de cultura, espectáculos, salud y política, así como correctora de estilo, además de áreas de Comunicación Social. Fui tallerista del programa de fomento a la lectura de la SEP en el extinto programa Libros del Rincón. Mi desarollo poético ha sido forjado en talleres como el de los maestros Carlos Illescas y el de Saúl Ibargoyen. He publicado los siguientes libros: Jaulas Ocultas (Cobaes y gobierno del estado de Sinaloa), Ciudad como Seca Hierba (la Tinta de Alcatráz y el gobierno del Etado de México, he participado en las antologías La Mujer Rota, Musa de Musas y Pájaro de Agua en la editorial Praxis. En 1999, me otorgaron el Premio Interamericano de Poesía Navachiste, Jóvenes Creadores, en este año 2009 gané el primer lugar en el certamen de cuento, tradiciones de Xochimilco. He participado en eventos poéticos como el de Mujeres Poetas en el país de las Nubes que se realiza en Oaxaca, también en el Encuentro Internacional de Poesía en la Habana Cuba. Actualmente preparo mi libro Poemas del Encierro de próxima publicación. Formo parte del Colectivo Cuervo Gris que invita a todos los poetas a participar en Poesía en el Aire, donde a través de los altavoces tradicionales del Pueblo de San Gregorio Atlapulco, se escuchará la poesía tanto en la zona chinampera como en las montañas que flanquean esta comunidad semirural de Xochimilco DF.